La Plaza de San Francisco es un amplio espacio urbano ubicado en el centro de Sevilla, en la confluencia, entre otras de la calle Sierpes, Granada, Chapineros, Álvarez Quintero, Hernando Colón y la Avenida de la Constitución. En ella se ubican la parte trasera del Ayuntamiento de Sevilla o el Banco de España.
La plaza era ya en el siglo XVI el corazón de la ciudad, actuando como plaza mayor. En ella se encontraban ubicados los principales poderes civiles. En esta plaza se celebraron los famosos autos de fe de la Santa Inquisición, las diversas fiestas de toros y cañas, y al igual que en la actualidad constituía uno de los lugares principales en la conocida como carrera oficial de las procesiones de Semana Santa y Corpus Christi. Desde la Reconquista es conocida esta plaza como Plaza de San Francisco, sin embargo a partir del siglo XIX tras la aprobación de la constitución de 1812 se rotula como Plaza de la Constitución esculpido en una losa de mármol. Sin embargo, el 6 de mayo de 1814 los enemigos del nuevo régimen constitucional arrancaron y rompieron dicha losa, sustituyéndola por una tabla en la que ponía «Plaza Real de Fernando VII», que finalmente fue grabada en mármol. De nuevo, en enero de 1820, los leales a la constitución derribaron la nueva placa de mármol y pusieron en su lugar un cartel impreso donde ponía «Plaza de la Constitución». Sólo unos meses duró este nombre, pues en septiembre de ese mismo año fue renombrada como «Plaza del Rey». Éste rótulo persiste durante más tiempo aunque no a falta de intentos por parte de los liberales de nombrarla como «Plaza de Isabel II». Con la llegada de la II república fue renombrada como «Plaza de la Libertad», aunque un año después fue renombrada como «Plaza de la Constitución». En 1936 se la denominó «Plaza de la Falange Española» hasta que, finalmente en 1980 recupera el de «Plaza de San Francisco», nombre que se conserva actualmente.
Foto: De Anual – Trabajo propio, CC BY 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=5988042