Benito Sanz y Forés fue Arzobispo de Sevilla desde 1889 hasta su fallecimiento en 1895. En 1893 fue nombrado cardenal por el papa León XIII. Está enterrado en la Catedral de Sevilla.
Además, fue Obispo de Oviedo y Arzobispo de Valladolid.
Tiene dedicada la Calle Cardenal Sanz y Fores, junto al Palacio Arzobispal, entre las calles Don Remondo y Abades.
Foto: archisevilla.org